"...nadie podrá negar a los versos de Edda Piaggio la osadía
de reafirmar los contextos infinitos que querían desterrar Eliot, Ransom
y Tate. Edda impone una lengua que nada tiene que ver con aquella llena de ironías
y ambiguedades que ellos pugnaban.
No sé por qué sus versos últimos me han recordado
el "schiacciato" de Desiderio, dónde el mármol se
ha limado tanto que las líneas se disuelven, se desvanecen las junturas
y se produce una extraña luminosidad..."
Prof. ESTEBAN TOLLINCHI. Universidad de Puerto Rico
POEMAS DISPONIBLES:
POEMA XIX
Sordo refinado
memorable
tendido en el gran boulevard
oscuro
temblaba
Embalaje de malogros y perfidias
cuando niño cantó una canción
amarga
y se metamorfoseó en sombra
Su brazo apretó el mío tantas veces
que dejó en mí una señal
Techos bajos
para su luz de ansias
sólo golpeada por Dios y por letargos
dejó en mi una señal
SÍMBOLOS VISIBLES
POEMA XXIII
Suavidad de la noche
su piel de durazno
dibujando anillos
tocan mis manos
su piel que no me basta
no me alivia no me alcanza
Hay presentimientos en la suavidad de la noche
perfumes sobre las manchas,
caminos que recorrí fueron tantos
que al final no tuve nada,
espirales
vértigos
aunque fuera de día
la suavidad de la noche te la ofrezco
ni me alivia ni me alcanza